Una Noche


Una noche mientras patrullaba con un compañero el sector que nos corresponde, nos llaman por que había una pelea. Una de las personas tenia un arma de fuego, uffff bueno los policías somos nosotros vamos. Eso son los momentos de probar varias cosas, el motor de la patrulla, las sirenas y biombos y cual de los dos tiene miedo. Nunca escucharas un policía decir que tiene miedo al dirigirse a una situación donde su vida y la de su compañero esta en riesgo. De camino se pregunta por radio si hay descripción de las personas envueltas, principalmente del que porta el arma. Mientras te acercas el corazón late más rápido y buscas con la mirada las descripciones que te dieron por radio, si no hay descripciones.

Buscas en los alrededores algo fuera de lo normal, movimientos, actitudes, gente que señale a otros. Si tienes la suerte de conocer la descripción como en este caso, que la persona se fue caminando y la gente nos dijo hacia donde, mejor ya que te enfocas en la persona “sola” que caminaba como si nada con la pistola en la cintura.

Apagamos los biombos, las luces y sirena y fuimos tras el supuesto pistolero. Sorpresa se llevo, cundo vio un arma por fuera de la ventana de la patrulla que se acercaba a gran velocidad hacia el, mientras eso ocurría lo vimos sacar su arma de la cintura y dejarla caer al piso. Mientras uno lo apuntaba, el otro hacia lo mismo al bajarse de la unidad, ya al ordenarle que se tirara al suelo boca abajo con las manos y pies separados, uno de los dos enfundo el arma de reglamento mientras el otro con la suya a 45 grados verificaba con una mirada rápida el área.

Se esposo en el suelo para poder recoger el arma que tiro y registrarlo lo mas rápido posible ya que el sitio donde nos encontrábamos no era el mejor barrio del área metro.

Verificamos el sitio de la pelea y descubrimos que no hubo pelea como informaron, fue una discusión y los que discutieron se habían marchado, solo quedaba el pistolero solitario que arrestamos que tendría unos 55 años y estaba un poco bebido y nos pidió perdón por lo sucedido, pero según nos contó se había cometido una injusticia con el y en la supuesta discusión lo habían amenazado de muerte y el ni corto ni perezoso busco una pistola vieja y con moho que tenia guardada y volvió a ver si era verdad que lo iban a matar.

Para que el turno del siguiente día no se afectara el sargento dijo que solo uno de los dos iba a someter el caso con el fiscal, decisión que no nos gusto pero que se iba hacer, yo me quede solo el resto de la noche y mi compañero se retiro a dormir para levantarse 4 horas después y estar a los 8 am en el fiscal. Para ser honesto el compañero contó la versión tal como ocurrió y el fiscal dijo que no iba a someter ningún cargo, cosa que impresiono pero, donde manda fiscal el policía no tiene mas remedio.

Abusadores que no les importa que el policía tenga que dejar de hacer muchas cosas de su vida diaria para estar casi sin dormir, en la oficina de un fiscal recién desayunado y descansado. Para luego decir que no va a someter, pues bien todavía falta que nuestro amigo nos contó en la noche, que entro a la isla con un permiso de trabajo y hacia como 6 años que se venció y estaba ilegal en el país.

Mi compañero hizo las gestiones con inmigración y le contestaron que a nuestro amigo la familia que estaba aquí en la isla lo estaban reclamando y nada más y nada menos que por motivo del fiscal no someterle cargo alguno el caso no lo vio un juez. Y se preguntaran que tiene que ver el fiscal a estas alturas, que inmigración no lo iba a deportar porque el caso no llego a un juez y como su familia lo estaba reclamando estar en Puerto Rico con un permiso de trabajo expirado era algo así, como una falta menos grave y por eso no deportan.

Así que el final fue, que prácticamente por poco mi compañero lo tiene que llevar a la casa luego de pagarle el desayuno. El arma hubo que llevarla hasta el depósito de armas en Hato Rey para decomisarla. Claro, otro día.

2 comentarios:

Prometeo | 03 febrero, 2009

Estos relatos nos ayudan a nososotros que no laboramos en la policía a entenderlos mejor a ustedes. Adelante y éxito.

Rafael | 04 febrero, 2009

Gracias por la visita, espero contar algunas mas.